No podemos negar la importancia que tiene la sala o el lugar en el que se interpreta un concierto de música clásica a la hora de disfrutar de éste. La belleza del entorno y su carácter histórico estimulan todos los sentidos, creando una respuesta emocional muy diferente de la que se produciría si simplemente escuchásemos nuestra música favorita en nuestros propios hogares.
Austria posee muchas maravillas, pero la Fortaleza de Salzburgo, el impresionante edificio que toma el nombre de la encantadora ciudad a sus pies, destaca entre todas ellas. Construida en el siglo XI, cuando sirvió de bastión para el Sacro Imperio Romano Germánico, la Fortaleza de Hohensalzburg compite por el título del castillo mejor conservado de Europa. Esta fortificación, de hecho, nunca ha sufrido los estragos de una batalla, ni siquiera cuando fue invadida por las fuerzas de Napoleón a principios del siglo XIX.
Hoy en día, los visitantes de la fortaleza pueden disfrutar tanto de una cena como de la música clásica en este histórico castillo. La cena y concierto Una velada en la fortaleza les ofrece la experiencia más completa que tiene lugar en este famoso edificio, emblema de Salzburgo, e incluye: el trayecto en el funicular más antiguo de Austria desde el corazón de Salzburgo hasta la fortaleza (tome nota de que sólo se aplica a los trayectos efectuados no más de media hora antes del inicio de la cena; el viaje en sí dura menos de un minuto), una suculenta cena y uno de los Conciertos en la Fortaleza interpretados por los brillantes músicos del Ensemble Mozart de Salzburgo (o por la Orquesta de Cámara Mozart de Salzburgo los jueves, viernes y sábados entre el 1 de mayo y el 31 de octubre). La entrada categoría VIP para el concierto, el cual tiene lugar en la Sala de Armas o en la Sala Dorada de la fortaleza dependiendo de la fecha escogida, incluye además un programa del mismo y una copa de vino espumoso en el intervalo.
Celebrándosen en Salzburgo, estos conciertos rinden lógico homenaje al compositor más famoso de la ciudad, Wolfgang Amadeus Mozart, nacido en Salzburgo y más exactamente en el número 9 de la Getreidegasse, el 27 de enero de 1756. Pero los programas interpretados tanto por el Ensemble como por la Orquesta incluyen también obras de muchos otros compositores, incluyendo a compatriotas de Mozart tales como Joseph Haydn, Franz Schubert y Johann Strauss hijo, pero también a Antonín Dvořák y Johann Sebastian Bach.
Esta velada en la Fortaleza de Salzburgo, una oportunidad para sentirse en la cima del mundo, quedará para siempre grabada en su memoria.
