Sonatas para violín de Wolfgang Amadeus Mozart en la Antigua Residencia de Salzburgo es el evento perfecto para aquellos que desean asistir a una experiencia histórica y musical a la vez. Fue, de hecho, en la Antigua Residencia donde Mozart, con tan sólo seis años, ofreció la primera de sus muchas representaciones para la Corte de Salzburgo. Para añadir aún más autenticidad, el violinista se verá acompañado en cada concierto por una copia de un clavecín doble manual fabricado por Pascal Taskin en 1769.
Hasta principios del siglo XIX la Antigua Residencia fue hogar de los príncipe-arzobispos de la ciudad, los jefes de Estado de Salzburgo cuando éste era un principado del Sacro Imperio Romano Germánico. El Conde Hieronymus von Colloredo, quien nombró a Mozart organista de la Corte, fue el último de los gobernantes eclesiásticos de la ciudad, y fue enviado al exilio después de que Salzburgo cayera ante los ejércitos de Napoleón. Según ciertos documentos, los orígenes de la Antigua Residencia se remontarían a 1120. Sin embargo, los espléndidos edificios y plazas que los visitantes pueden admirar hoy en día fueron construidos bajo las órdenes de Wolf Dietrich von Raitenau, príncipe-arzobispo de 1587 a 1612.
Mozart escribió treinta y seis sonatas para violín que pueden dividirse en dos períodos diferentes. Las que datan de entre 1763 y 1766 las compuso cuando todavía era un niño prodigio (debía de tener apenas diez años cuando terminó la última de estas obras). Las denominadas sonatas de madurez las creó mucho más tarde, entre 1778 y 1788, cuando Mozart tenía entre veinte y algo más de treinta años.
Si las sonatas que compuso en su infancia asombran al oyente – ¿cómo alguien tan joven pudo crear piezas musicales tan logradas? – es el segundo grupo de sonatas el que seduce a su oído. No hay ni una sola nota desperdiciada en estas magníficas composiciones. El clavecín no está subordinado al violín, sino que más bien ambos instrumentos parecen ser parte de un diálogo musical perfecto. Su interpretación y el espléndido marco de la Antigua Residencia forman una alianza sublime.
