Uno de los mayores éxitos de Broadway llega a Viena. El musical El violinista en el tejado (Fiddler on the Roof) de Jerry Bock, estrenado en el Imperial Theatre de Nueva York el 22 de septiembre de 1964, fue representado nada más ni nada menos que en 3.242 ocasiones en su primera serie de representaciones, la cual culminó en el Broadway Theatre el 2 de julio de 1972. Fue, en su momento, el show que más tiempo había permanecido en cartelera en la historia del teatro musical.
Muchos recordarán El violinista en el tejado gracias a la gloriosa versión cinematográfica de 1971 (para la cual Joseph Stein, el libretista de Bock, escribió el guión) protagonizada por el legendario Topol en el papel del atormentado pero honorable Tevye.
Tevye, un pobre lechero ucraniano que vive en Anatevka, una comunidad judía en la Rusia zarista, se esfuerza por sustentar a su esposa Golde y sus cinco hijas. Siguiendo la tradición, se encarga de encontrar un esposo conveniente para sus hijas. Sin embargo, en lugar de obedecer a los deseos de su madre y su padre, las tres hijas mayores, Tzeitel, Hodel y Chava, eligen ellas mismas a sus maridos y Tevye se encuentra dividido entre la felicidad de sus hijas y sus profundas creencias.
Tevye acepta finalmente la decisión de Tzeitel de casarse con Motel, un humilde sastre; pero cuando Hodel se niega rotundamente a abandonar a Perchik, un político radical, y Chava se enamora de Fyedka, un soldado ruso, la tolerancia de Tevye da paso a la ira. No puede aceptar a Fyedka como yerno y, además, teme por la seguridad de Hodel después de que Perchik ha sido detenido y enviado a Siberia. Cuando la familia se ve obligada a abandonar su hogar y se divide para encontrar sus propias fortunas, Tevye no tendrá otra opción más que confiar en los nuevos hombres en la vida de sus hijas.
Un verdadero melodrama, El violinista en el tejado es una de esas raras obras que es triste, hermosa y edificante a la vez. Entendemos tanto el deseo de las hijas de Tevye de seguir al amor verdadero, al mismo tiempo que comprendemos la desdicha del padre y le compadecemos por haber perdido el único mundo que ha conocido. Jerry Bock y Sheldon Harnick, autor de las letras, nos han dejando un catálogo de canciones que quedará entre nosotros para siempre.
Un espectáculo inolvidable, El violinista en el tejado, interpretado en la Ópera Popular de Viena.